miércoles, 1 de julio de 2009

¡Que se caiga el puto cielo!

Y con èl mi dolor. Que se caigan los àrboles infelices y se caiga tu pinche mirada de mierda.
Que se caiga el corazòn y que se pudra la pasiòn. Que se caiga la esperanza y la espera (ya de paso). Que se caiga este teatro y esta puta farsa. Que se caigan todos, ¡Que se caigan todos! Que se caiga la red y no pueda escribir mamadas. Que se caigan las cejas y las pestañas, los labios y el cerebro (poco falta). Que se caiga la pinche escuela y las faldas de esas pirujas. Que se caiga la moral y que se caiga todo el mundo.
Mejor, en vez de eso, que te caigas tù.
Puta madre!

teotlnana

No!

No quiero escribir. Me rehuso a hacerlo. Siento que ya no hay màs que decir, que sentir, que esperar.
No puedo hablar, mi lengua se entumece cuando estàs cerca, sòlo deja salir palabras tontas que me avergüenzan, se seca y tiembla.
No debo quererte y por màs que castigo a mi corazòn no entiende que voltee a otro lado, lejos de la autodestrucciòn. Pero tengo curiosidad... tan fuerte y tan pendeja, sòlo busca una oportunidad de descubrir tus pensamientos, por muy alejados que sean de mi realidad, pero duele no tener valor para nada.
En agradecimiento a tu presencia -tan lejana, debo aclarar- mi cuerpo se comporta tan mal. Automàticamente sale lo màs tonto de mi, me vuelvo torpe e infantil. Si eso es estar enamorada ya no quiero estarlo màs. Pudiendo huir estoy fielmente receptiva a una sonrisa, por muy falsa que sea. ¡Què flojera! Pero què inevitable.
No, no puedo escribir. Siento còmo las palabras rebotan en mi mente pero no quieren salir ordenadas, me insultan, me humillan, me seducen y me golpean. Como si aùn hubiera algo que decir...
Te extraño... màs de lo que puedes concebir.
teotlnana